El Ejecutivo anunció la semana pasada la bajada del tipo nominal en el Impuesto de Sociedades del 25% al 23% para los pequeños negocios, que estaba pendiente desde el acuerdo de investidura del actual Gobierno de coalición. Sin embargo, no todos los autónomos societarios y pymes van a poder acceder a esta rebaja que, según el Ministerio de Hacienda, supondrá en 2023 más de 700 euros de ahorro fiscal para cada empresa que cumpla los requisitos y logre acceder a la medida.
Para acceder a esta rebaja de impuestos, los negocios tienen que cumplir dos requisitos:
Tener una cifra de negocios inferior al millón de euros
El requisito para poder beneficiarse de esta rebaja de impuestos, no está ligado al número de trabajadores que tenga la empresa, sino a su facturación. Tendrán que haber obtenido una cifra de negocios inferior al millón de euros.
No se habla de rendimientos netos o beneficios, sino de facturación.
Haber tenido una base imponible positiva
Sin embargo esta medida, tal y como está articulada deja fuera a las empresas que más lo necesitan ya que es posible que éstas sigan atravesando momentos difíciles y todavía no hayan obtenido beneficios, derivado de la crisis del COVID-19 y de la actual subida de precios.
Otras medidas para autónomos en estimación directa y módulos
El nuevo acuerdo afectaría a la mitad de los autónomos persona física (alrededor de 1,6 millones) a través de un aumento de las deducciones o de las rebajas en los rendimientos a declarar en el IRPF.
Una de las principales medidas y que afectará a un mayor número de autónomos, será el aumento del 5% al 7% de la reducción por gastos deducibles difíciles de justificar.
Para beneficiarse de esta medida hay que tributar por estimación directa simplificada en IRPF y haber obtenido beneficios en el año anterior. Esta reducción consiste en aplicar un determinado porcentaje sobre el beneficio previo de la actividad. A partir del 2023 sería un 7%. Tras aplicar ese 7% a los rendimientos netos obtenidos por la actividad, habrá que sumar el resultado obtenido al total de gastos, para así reducir los beneficios finales sobre los que se aplicará el impuesto de la renta.
Además, los módulos experimentarán una reducción del 5%.
FUENTE: autonomosyemprendedor.es